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ya esta disponible... EL CABARET DE LOS SUEÑOS NOCTURNOS

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PINCHA EN LA PORTADA para ver el vídeo presentación de EL CABARET DE LOS SUEÑOS NOCTURNOS, el libro que, de la mano de Producciones Nocturnas y Absenta Poetas, aglutina los poemas, fotografías y relatos que forman parte de Nocturnos y El cabaret de los sueños, mis dos obras literarias ilustradas en Internet. Para los que vivís fuera de Santander, y estéis interesados, lo podréis hacerlo vía e-mail, para remitirlo por correo. Y pronto, tras mi espectáculo Muñecas de cristal, el Gran Show de presentación del libro por diversos lugares de Santander. Precio: 10 euros. Mail de contacto: isidrorayestaran@gmail.com

HABITANTES DE UN MISMO MADRID

















La inmovilidad de los que callan; el silencio de los amordazados; estatuas que lo dicen todo; madres que han perdido a sus hijos y no tienen ya a quien columpiar; parejas que se aferran en un sentimiento de amor que nadie podrá destruir por muchas manifestaciones que propongan; habitantes de un mismo mundo, pero qué distintos unos de otros…
Majestuosas avenidas con recovecos castizos llenos de vida y pasado; teatros alternativos y otros con enormes palcos y cortinas; mimos en espera de su moneda y drogadictas que bailan al son de una música pregrabada en la plaza de Chueca; los barquilleros de toda la vida; una tienda para espías en la calle Barquillo; los chulazos que se apoderan de sus víctimas en los encuentros sexuales furtivos de los grandes cuartos oscuros; los camareros que aguardan a sus clientes de siempre; las calles tan llenas de músicos callejeros; la Plaza del Sol, a punto de dar las doce de la noche…
Imágenes de Semana Santa en multitud de tiendas en la calle Arenal e imágenes de santos desnudos en clubes alternativos de copas; El Medinaceli como refugio espiritual y los conventos de monjitas repletos de turistas ávidos de historias ya pasadas; museos con grandes obras, musicales con colas enormes y jóvenes actores derrochando arte en el DT Espacio Escénico de la calle Reina…
Un oso y un madroño; un Retiro para escapar de la rutina; Alfonso XII al fondo de un estanque y jubilados leyendo su dominical alrededor de la grandeza de esa atmósfera idílica y apetecible; el ángel caído, regodeándose con quien le contempla; el palacio de cristal, tan transparente y repleto de encanto…
Los hostales de la zona de Chueca y los grandes hoteles junto al Prado y el Congreso; las pensiones en Lavapiés y las antiguas casas de putas en un mismo encuadre para una imagen imposible de un pasado que grita por salir del presente…
Un escritor del norte que fotografía vida en color sepia y un testigo fiel y amigo que contempla todo aquello desde la gran perspectiva de la experiencia. Un plato del día en una taberna castiza antes de un menú de diseño en el restaurante de moda de la calle Barbieri…
Todo ello con un único objetivo: plasmarlo en mi diario ilustrado llamado Nocturnos, compartirlo contigo, sentirlo con ellos y recordarlo con Carlos, el encargado del Hostal Atrium.
He visitado Madrid dos veces durante este 2007.
Creo que ya empiezo a comprenderles a todos.



ISIDRO R. AYESTARAN, 2007

1 comentario:

. § . dijo...

La necesidad de comprender de una otredad es la notica de la supervivencia del egocentrismo.

Justificacion apresurada.
_________________________

ver y conocer lo otro es sin duda ver y conocer como nosotros, El hecho de compartir las vicencias es compartir "nuestras vivencias", nuestro despliegue.
Esto:
por un lado, abre la posibilidad de reflexionar sobre la necesidad de la identidad propia de un sujeto moderno.

pero por otro lado significaria seguir el despliegue propio de las vivencias de NOCTURNOS, una repetición que no es lo mismos, pues serian las vivencias reflejadas, y de hecho, el reflejo implica una imagen y un real, o sea, a dos, pero que son lo mismo, son un movimiento.

el problema al relatar las vivencias de la calle, es que siempre persibimos la sorpresa y el miedo juntos, como las putas (las reconocidas y las no-reconocidas) que salen debajo de la sombra de alguna luz de algun farol, sedientas de almas, sedientas de violencia que reciben por el orto y te la devuelven con una mirada sutil y provocadora.

Saludos